Reflexión 40 - El Perdón
Siempre me había preguntado: ¿Si Dios nos perdonó quién soy yo para no perdonar?
La respuesta a está pregunta Dios la depósito en mi corazón hace un tiempo. Simplemente ya él pago el precio por perdonar mis pecados y de igual forma yo tengo que perdonar a mis angustiadores.
Por medio de su amor recibimos perdón de pecados, todos los que en él creyeren (Hechos 10:43). Dios entregó todo por nosotros para perdonar nuestros pecados, que creamos en él y recibamos la vida eterna. Es increíble el amor inmerecido que Dios tiene por cada uno de nosotros. Sin embargo, aún hay muchos que no le conocen o le conocieron y se apartaron de sus caminos...
Cada vez que pases por un momento de dificultad y pienses o digas que no vas a perdonar a alguien. Piensa en el acto de amor que Dios hizo por ti para perdonarte, amarte y salvarte.
¡No lo olvides!
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