Reflexión 69 - Manos a la Obra

Anímate y esfúerzate, y manos a la obra; no temas, ni desmayes, porque Jehová Dios, mi Dios, estará contigo; él no te dejará ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa de Jehová.  (1Crónicas 28:20)

Esta poderosa palabra nuevamente le confirma a Salomón la obra para la que ha sido llamado. Su padre David lo anima a comenzar la construcción del nuevo templo sin temor alguno, porque Jehová estará con él hasta que acabe la obra.

En ocasiones el Señor nos lleva a servir a lugares inimaginables, a gente que habla otro idioma o hacer una obra tan grande que pensamos ¿cómo lo haré?... Sin embargo, así como Dios estuvo con Salomón asimismo estará contigo en todo momento. Vendrán pruebas y dificultades como parte del proceso, pero durante la obra que Dios tiene para tu vida y los suyos verás los frutos de tu esfuerzo.

¡Recuerda, lo que siembras, cegarás!