Fluyendo con los Confinados
El pasado jueves, 1 de marzo de 2018, fue un día que jamás olvidaré. Mi mañana comenzó con un amanecer radiante agradecida por esos primeros rayos de luz que cubrían mi ser. Muy motivada logre dejar todo listo en casa y llegue súper puntual a mi destino del día. Ofrecer una Charla Motivacional enfocada en el tema de los roles del equipo para Confinados de la Cárcel 1072 en Bayamón, Puerto Rico. Por primera vez tenía la oportunidad de impactar a esta población rezagada en nuestra sociedad, pero con gran valor para mí por la experiencia vivida con mi tío ex confinado.
Desde hace varios meses mi compañera de estudios universitarios Sandra Cordero me había contactado para coordinar la charla. Sin embargo entre una situación y otra no se había dado hasta que llego el momento. En un abrir y cerrar de ojos allí estaba entusiasmada, tranquila y a la vez llena de fe porque sabía que era un reto y que había un propósito con mi presencia en aquel lugar encerrado siendo yo libre como la mariposa.
Comencé a caminar solo con mis llaves y una tarjeta de identificación sin prendas solo con mi ropa y mis zapatos. Llegue a la entrada me registraron y pude entrar a la primera puerta sin saber que me esperaban unas cuantas mas…Hasta que llegue al salón de clases de mi colega y allí comenzaron a llegar los confinados. Una vez presentada los salude y les pregunte como estaban. La energía todavía no estaba fluyendo así que les dije cuando les pregunte nuevamente como están ustedes me dicen fluyendo. Ellos se rieron y asimismo con gran fuerza me respondieron “fluyendo”.
Fue en ese momento que comencé la charla. Les conté un poco de mi historia para que me conocieran. Cuando les dije que fui criada en un residencial público "caserio" varios se sintieron identificados. Fui creando un ambiente de confianza y cada uno se mostraba atento a lo que les estaba compartiendo. Primero les presente un video con un toque de humor para que identificaran los factores claves de un equipo. Luego ellos mismos definieron lo que es un equipo. Les explique una dinámica en equipos de dos para evaluar la comunicación y la mayoría la hizo muy bien. Luego llego el reto de entender los roles del equipo y aplicarlos en una dinámica grupal donde debían recrear una escena donde pudieran aplicar los roles.
Recuerdo que los motive y les dije “he ofrecido este tema en empresas, escuelas, universidades y por primera vez en una cárcel. Voy a ustedes lo pueden hacer mejor” Entonces comenzó la aventura los dividí en tres grupos y comenzaron a fluir. Sus rostros de felicidad y la integración se podían apreciar y como la motivación inspirada por la enseñanza se hacía realidad. Fue bien gratificante ver como aplicaban todo de una forma excelente. Al final un aplauso fuerte al estilo Neysha Fluye no podía faltar. Su maestra la Sra. Cordero muy orgullosa los aplaudía.
Finalmente, los comencé a reconocer por lo bien que lo hicieron y uno de los líderes del grupo dijo “Queremos decirle a nombre del grupo gracias por sacar de su tiempo y venir aquí en mi vida había aprendido algo como esto” Wow, inevitablemente se me aguaron los ojos y sonríe humildemente. Mi mayor regalo fue recibir esas palabras y los rostros de felicidad y agradecimiento que veía en la mayoría de los confinados mientras me despedía estrechándole la mano a cada uno.
Neysha Fluye y tú?
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