Reflexión 90 - El juzgar a los demás

Porque juzgar a los demás cuando debemos entender que el Señor es quien nos juzga.

Recuerda:

No juzguéis, para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la medida con que medís, os será medido.  ¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? (Mateo 7:1-3)

Aceptar nuestros errores sin justificarse es una cualidad humilde ante las debilidades de la vida. No justifiques tu error diciendo: "Yo soy humano y cometo errores".  ¿Porqué justificarse de esta forma negativa y simplista? Mejor reconoce tus errores y deja que Dios sea quien te corrija y te juzgue de acuerdo a su voluntad.

Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de Dios. (1 Corintios 4:5)

El apóstol Pablo recomienda que no debemos juzgar nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor y aclaré lo que está oculto para nuestros ojos.  Porque él conoce todo para Dios no hay secretos.

Reconoce tus errores humildemente sin juzgar y justificarte.