Reflexión 153 - La verdadera riqueza

Si te dieran la oportunidad de cumplir tres deseos en tu vida ¿cuáles serían?
Muchos dirian tener una casa, un carro, un viaje con todo pago, etc. Otros dirian salud, una pareja, tener hijos, etc. Sin embargo, son menos los que piensan en la verdadera riqueza que reside en pedir sabiduría, prudencia, bondad, respeto, amor, misericordia, paciencia, paz, gozo, entre otras cualidades y valores que alimentan nuestro ser interior.

Escucha esa voz que te dice: No te afanes por acumular riquezas materiales cuando la verdadera riqueza proviene de tu interior. No pongas tu corazón en las riquezas de este mundo, mejor cultiva tu alma para que florezca la belleza interior que vive en ti. Es mejor seguir la senda de la vida que perseguir las riquezas a las que un día les saldrán alas como un águila. Cuando amas genuinamente a tu Creador él te llenará de cosas buenas y te suplirá todo aquello conforme a su voluntad.

Deja la incertidumbre por aquello que te pueda faltar y descansa en la esperanza de aquel que dió TODO por ti. No te ahogues por las preocupaciones de este mundo mejor enfócate en amarte a ti mismo, desarrollando tus talentos y cultivando tu ser interior.

Con amor,

Neysha

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