Reflexión 120 - La Prudencia
La prudencia es una cualidad muy grande que no todo el mundo posee. Proviene de la inteligencia, el cuidado y la humildad.
"Y Dios dio a Salomón sabiduría y prudencia muy grandes, y anchura de corazón como la arena que está a la orilla del mar." 1 Reyes 4:29
Nadie ha sido ni será más prudente que Salomón. Sin embargo, nosotros debemos buscar cada día ser prudentes en lo que hacemos.
La palabra nos da varios consejos de cómo ser prudente:
En los labios del prudente hay sabiduría, pasa por alto el insulto, actúa con cordura, sabe discernir, fija su camino, controla sus impulsos, adquiere conocimiento, ve el peligro y lo evita, no muestra lo que sabe para vanagloriarse y soporta el sufrimiento.
Es importante que seas prudente en tu vida y en cómo comunicas lo que sabes. Recuerda siempre que lo contrario de la prudencia es la insensatez.
Aprovecha hoy y declara con tu boca que serás prudente en tu camino.
El que se comprometa escriba AMÉN.
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