Reflexión 125 - La oración continua cambia tu vida

En reflexiones anteriores se presenta la oración como el acto genuino de hablar con Dios.

Es importante resaltar que la oración debe ser constante, o sea, en todo momento. Puede ser al levantarte, mientras guías, antes de comer o al acostarte. Sea cual sea el momento lo que cuenta es la dependencia que tienes de hablar con tu Creador. El salmista dijo: "Tarde y mañana y a mediodía oraré y clamaré, Y él oirá mi voz." (Salmo 55:17)

Mientras oras el Señor escucha, pero luego debes tomarte un tiempo para escuchar y estar atento a lo que él tiene que decirte.

La relación íntima es cuando conoces el interior de la otra persona y viceversa. Asimismo debe ser nuestra relación con Dios. Mantente atento a lo que te quiere decir o hacer contigo a través de la Biblia de una persona o de las circunstancias.

Recuerda orar constantemente, con fe y acción de gracias.

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